Desde las canchas de fútbol ecológicas y las cintas de correr que convierten el esfuerzo humano en electricidad.
Importantes actrices famosas son pioneros activistas en la defensa de la flora y la fauna.
Pero no hace falta ser famoso para poner un grano de arena en esta lucha. Los ciudadanos anónimos, como tú o como yo, podemos empezar reciclando botellas, bolsas de plástico y papel, no usando aerosoles ni desperdiciando comida, usando al mínimo el agua y la electricidad.
Por otro lado, en la industria, todos tienen un papel que cumplir: los empresarios textiles, por ejemplo, pueden producir sin necesidad de contaminar el ambiente utilizando productos orgánicos, puros y de colores neutros, que no exijan procesos nocivos de teñido. Lo mismo vale con los fabricantes de cosméticos.
Proteger el planeta no es una cuestión de hoy sí y mañana no, es un estilo de vida, una forma de pensar y de actuar, de comportarse en este, que es nuestro hogar, y de agradecerle a la madre naturaleza todo lo que nos da.
La relación entre la ecología y el deporte es clara: el deporte ayuda a la salud tanto mental como física del hombre, y la ecología se encarga de buscar por todos los medios tener un ecosistema sin contaminación. Cuerpo sano en entorno sano. Estas son algunas de las principales novedades.
Fútbol. Las canchas de fútbol ecológicas son uno de los proyectos que van creciendo. El relleno del campo de juego, en lugar de caucho, tiene tres elementos naturales: estopa de coco, elastómero de origen vegetal y granulado de corcho. Además, su césped está fabricado con botellas plásticas recicladas.